MATERIALMENTE FELIZ
En el fondo seguimos siendo humanos.
Cuando apartamos nuestros sentimientos causados por heridas emocionales y nos
desprendemos de los prejuicios que nos apartan de nuestro ser.
Al llegar los terremotos emocionales
que prueban nuestro carácter en el vaivén de la vida, esencialmente quedamos
ceñidos en nuestra estructural vital.
Volver a nuestro ser no requiere que
la vida nos sacuda, podemos iniciar a desempolvar el propósito individual que
nos mueve.
Quien conoce su esencia conoce su
destino, vive en permanente evolución sin apartarse de sí.
El lujo, la fama, la idolatría, los
placeres carnales y venalidades nos cosifican, nos vuelven materialistas.
Nos convertimos en depositarios.
Invertimos tiempo y esfuerzo en cuidar cosas, apartándonos de nuestro propósito
en la vida, ser felices.
El dolor emocional priva nuestra
memoria al punto de no recordar quien soy y que me hace feliz.
Recuérdate, valórate y cuídate. Toma
un tiempo para ti, busca tu norte y reinicia tu dirección a una vida feliz.
La felicidad debe orientar nuestro
accionar, estimular nuestra alma para sembrar actos de bondad y en el debido
tiempo cosechar buenas obras.
-Sandino Velázquez
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